El Gobierno de Irán acusó este sábado a Israel de implementar una política de tierra arrasada debido a la agresión continuada por las fuerzas de ocupación a la Franja de Gaza y  Cisjordania, después de la retirada de las fuerzas israelíes de las localidades cisjordanas de Yenín y Tulkarem tras diez días de asedio.

LEA TAMBIÉN:

Elevan a 40.878 los muertos en Gaza, mientras empeora situación en Cisjordania

El portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Naser Kanani, manifestó que «las imágenes sobre la demencial destrucción en todas las zonas urbanas y la infraestructura en Gaza y ahora en algunas zonas del norte de Cisjordania, particularmente en Yenín y Tulkarem, indican que el régimen israelí se ha visto frustrado en su posibilidad de victoria sobre la resistencia y la nación palestina y lleva a cabo una estrategia de tierra quemada».

De igual forma, destacó que «los países y las instituciones internacionales tienen el deber moral, humano y legal de evitar la repetición de los crímenes de guerra por parte del régimen israelí en Cisjordania».

Türkiye y  Egipto requirieron la necesidad de un alto al fuego en Gaza

Asimismo el presidente de Türkiye, Recep Tayyip Erdogan, y su homólogo de Egipto, Abdel Fattah El-Sisi, requirieron la necesidad de poner fin a las hostilidades en la Franja de Gaza.

Los líderes no estuvieron de acuerdo con el soporte militar que EE.UU., Reino Unido, Alemania y otras naciones brindan a Israel para cometer sus crímenes en Gaza. Resaltaron la situación de Palestina y destacaron la importancia del fin de las hostilidades y el arribo de ayuda humanitaria.

Al referirse al lanzamiento de miles de toneladas de bombas sobre la Franja de Gaza, Erdogan valoró que refleja el fracaso de Israel en tratar de quebrantar la voluntad del pueblo palestino.

Por su parte, El-Sisi resaltó la posición común en favor de hacer realidad el derecho del pueblo palestino a un Estado independiente y destacó la necesidad de la cooperación en la región.

Argelia exige a Israel acatar el derecho internacional

El representante de Argelia ante el Consejo de Seguridad de la ONU, Ammar Ben Jame, resaltó que suman alrededor de 41.000 gazatíes asesinados y es generalizada la destrucción de la infraestructura en Gaza como consecuencia de la campaña genocida y de limpieza étnica perpetrada por Israel.

Asimismo, consideró que las palabras ya no bastan ante las maniobras de Israel contra los palestinos y resaltó la importancia de accionar para que la entidad sionista acate el derecho internacional y rinda cuenta de sus crímenes de guerra.

En este sentido, instó al Consejo de Seguridad a tomar medidas inmediatas para garantizar  la observancia de las resoluciones e impedir más víctimas inocentes.

EN ESTA NOTA: